El despertar Consciente a la Naturaleza que somos.
- Dalia Ishani

- 12 jun 2023
- 6 Min. de lectura

En este momento en el que nos encontramos como humanidad, ante la oleada de nuevas tecnologías que se proyectan para amalgamarse en nuestra vida, como ya lo hemos venido experimentando desde el inicio de la era digital, pero ahora, no solo en las telecomunicaciones, o salud, negocios, sino de una manera mas penetrante en todos los ámbitos de nuestra existencia, como nuestro cuerpo, la produccion, servicios, incluso en la comunicacion visual, intelectual, etc. a la que tambien se le pretende catalogar como arte.
Se pretende "reemplazar" aquello que el humano es, reduciendolo, en definición, a un "recurso" humano, por lo tanto consumible y reemplazable por algo mas "eficiente"
En donde queda la gran población humanos dentro de todo esto?
Sabemos que actualmente, el mundo artificial, ese que hemos creado nosotros como lo conocemos, en el que vivimos, compramos, vendemos, creamos, nos movemos, está regido por los grandes conglomerados de empresas multinacionales que son los que diseñan la forma y ritmo de esta vida artificial en la que nos movemos, los gobiernos en realidad estan apegados a estos flujos ecomnómicos que siguen la estructura de un sistema económico que lejos de funcionar para el desarrollo orgánico, por lo tanto sustentable, de la vida humana, funcionan para el poder de unos pocos sobre la vida de toda la existencia en este planeta, incluyendo todos los recursos y seres que en ella vivimos. Todos lo vemos todos los dias en nuestar vida y en el sistema de valores que rigen sobre esta vida artificial sobre diseño.
No es poca cosa, un control tan masivo de la vida y explotación de recursos en este gran organismo llamado planeta Tierra, Gaia, Pachamama, que va exactamente en el sentido contario de la vida, ya que esta se ve afectada desequilibrandola al punto que los fenomenos naturales, las especies de animales, la misma población humana, se estan viendo en un proceso de muerte lenta, muy, muy lenta, casi imperceptible; como las enfermedades mentales que reflejan esa vida sin sentido y vacia que nos han diseñado y que hemos aceptado sin protestar o manifestar nuestro derecho de elección que ignoramos consistentemente, (conscientes, o no, de ello) a veces esta muerte se ve terriblemente contudente como nos lo mostro la pandemia, que removió y cambió la vida como estabamos acostumbrados.
Hasta ahora, salvo unas pocas excepciones, la vida simplemente se ha "aceptado" para poder encajar en este sistema coersitivo de abuso sistematico.
Pero esta sucediendo algo en muchos y cada vez es más y más evidente, contudente e irreversible, estoy hablando de el siguiente paso evolutivo, que más que llevarnos a una nueva y desconocida naturaleza humana, al contrario, está regenerandose en cada uno de nosotros, es un grito de desesperanción que se manifiesta en la ansiedad, depresión, preocupación por la lista de cuentas por pagar, en el estrés crónico que gesta tanta enfermedades fisicas, mentales emocionales, la vida desde lo mas hondo de cada uno de nosotros está moviendonos a reconocer este evidente desequilibrio interno y externo, a escuchar desde lo mas íntimo de nuestros adentros, esa naturaleza que somos, esa que diseño tan perfectamente nuestros cuerpos y ordenó tan armonica y perfectamente los astros, galaxias así como las fluctuaciones del cuantum. No hay error en la creación y en los ritmos de la vida, ese inmenso fujo constante de energía esta totalmente vivo y se está tranformando constantemente, la luz y la sombra la experiementamos desde el parpadeo de nuestros ojos, así como la vida y la muerte en cada inhalación y exhalación. Desde nuestro diminuto ego en la gran inmensidad de la existencia universal, creemos, a través de la experiencia de nuestros cinco sentidos, que estamos separados no solo de los demás humanos, sino de la vida en sí misma; estamos tan adormecidos en nuestro diminuto mundo individual, tan distraidos de la vida, que olvidamos que somos parte de este gran todo super inteligente que vive y se expresa a través de cada uno de nosotros, dee nuestro cuerpo que es orgánico y vivo, por lo tanto su provisión de energía, indispensable para operar adecuadamente, tambien deber ser natural y orgánico, fuera de diseños basados en intereses de explotación comercial (Transgénicos), mismos que alteran la organización de la vida en el cuerpo, que en lugar de alimentar, envenenan.
Dentro de todo esto, la vida está ahí moviendose, siendo, intentanto sobrevivir, hasta que nosotros, los humanos nos volvemos conscientes de nuestra naturaleza libre y soberana, y nos damos cuenta de que está en nuestras manos el poder de elección sobre lo que ingierimos, ya sea para nutrir o envenenar nuestro cuerpo, así el planeta con el tipo de consumo y desechos que vamos dejando a nuestro paso, así tambien en nuestra relación con nosotros mismos, nuestro cuerpo, relaciones, hogar; todo está unido, y cada elección influye en el todo, trascendiendo en el tiempo y espacio, en forma de consecuencias; tales elecciones son nutricias y contribuyen la diversidad y equlibrio de la vida, o llevándola al punto de muerte.
El punto aquí es, si somos esa gran masa temerosa de salir del status quo, que se adapta perfectamente a mandatos abusivos, o bien, ELEGIMOS DAR UN PASO AL FRENTE EN NUESTRA PROPIA VIDA, y empezamos a crear, desde la expresión de la naturaleza-vida a través nuestro, y nos atrevemos a explorar un nuevo camino, que más que llevarnos lejos, nos trae de vuelta a nosotros mismos, al suspiro de alivio, a conocer, reconocer y respetar nuestros propios ritmos y ciclos, y como estos danzan al ritmo del infinito cosmos en perfecta sintonía; tal como los latidos de nuestro corazón, el flujo de la respiración, nuestras ganas de conectar con otros, o de permanecer en el contacto inefable con nosotros mismos; en una experiencia interna; así las estaciones en la tierra, los ciclos de reproduccion de los animales, de la luna y las mareas, etc.
Me refiero, a que esta experiencia, en realidad, no es nueva para el ser humano; porque así hemos vivido los humanos desde los inicios, sabiendo que las grandes mareas de cambio constante, de la vida en el planeta, nos influyen desde los mas íntimo, hasta la más masivo, en cada ápise de existencia, desde el cuantum, hasta al infinito universo.
A esta nocion de uno mismo, en lo individual y lo masivo, y sus confluencias, se le puede denominar inteligencia; osea que, inteligencia podría tambien definirse como el estado de bienestar, eficiencia de energía y recursos naturales propios como globales, universales, sostenibilidad, etc. Cabría decir, entonces, que nuestro estado natural, es la expersión mas pura de inteligencia, siendo consientes de ella, claro, y permitiéndole ser y expresarse a través de cada uno, po los tanto, en el todo.
Esta, es una consciencia (Darnos cuenta), que, si bien, no es nueva en nuestra naturaleza intrínseca, hemos sido condicionados estratégicamente para ir olvidando este estado natural, para darle lugar al sistema parasitario, que está alimentándose de nuestra energía y recursos, y los del planeta, trabajando para reducirnos a una gran masa que se mueve a sus ritmos egoistas y psicóticos que van en sentido contrario a la vida y asu vez usándonos a nosotros mismos para este proposito, usando sus tecnologías como herramientas para este propósito, volviéndonos dependientes de ello, mientras nos mantengamos bajo su estructura.
Nuestra vida es nuestra responsabilidad, nuestro bienestar también lo es, ya que este, influye en la vida en su totalidad, así como nuestro desequilibrio; desde el mas mínimo pensamiento que deriba en nuestros estados de ánimo, por lo tanto, en nuestras elecciones.
Este es el momento en el que la humanidad está decidiendo, en tiempo real, por un estado de bienestar, de la naturaleza-vida, o por las consecuencias de este sistema de control y muerte.
Ya no son tiempo de escondernos, sino de salir y dar frente en nuestras elecciones diarias, al poder de creación que tenermos a través de nuestras elecciones, decidiendo conscientemente. A quién nutrimos con nuestras compras? Con nuestra manera de consumo, y de desechos? estoy contribuyendo con esto a un estado de bienestar, respetando la inteligencia de la vida? o esto contribuyendo a la violación del respeto a los derechos de los seres vivos en este planeta, sin tomar responsabilidad de mis acciones y elecciones?
Siempre hay consecuencia a nuestros actos y elecciones. De qué manera estamos creando el mundo para nuestro yo viejo (si llegamos hasta ahí), para nuestra vida ahora, y para los niños (fururo de nuestra especie), y exitencia de los demás seres, con los que compartimos este planeta, que les toca vivir bajo estas consecuencias? Somos Concientes de lo que estamos creando? Nos damos cuenta lo poderosso que somos desde nuestra individualidad y como parte del todo?
La desición es de cada uno. Despertemos a la Vida.
Con Amor & Compromiso.
Dalia Ishani.




Así se siente, nuestro cuerpo pide otra manera de vivir. Me gusto mucho este artículo.
Gracias, muy interesante!